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El sitio muestra frases de ejemplo para palabras. ¿Cómo se podría usar la palabra en una frase?
" ... 4. Trastorno obsesivo compulsivo de la personalidad. Aquellos con trastorno obsesivo compulsivo de la personalidad están demasiado preocupados por las reglas, el orden, la pulcritud y la necesidad de la perfección. Son controladores, intolerantes e inflexibles. Su rigidez extrema lleva a la obsesión sobre cualquier detalle y sobre las reglas, y se transforman a sí mismas en profesionales indecisos e ineficaces. Insiste delante de personas con estas características que no necesitan ser perfectas para tener éxito. Es importante reiterar que ser demasiado perfeccionista a menudo está reñido con los buenos resultados, y que es más efectivo aprender de la experiencia, aunque se cometan errores, que prever la solución ideal. Dado que estos individuos suelen estar demasiado comprometidos a trabajar ignorando su vida personal y cualquier actividad de ocio, deberías animarles a tomar vacaciones y descansos y evitar así el agotamiento. ... "
" ... Como consecuencia de todas estas medidas, los Millennials han sido educados en la salud y el culto al cuerpo, en ocasiones obsesivo. Lo cierto es que hoy en día es impensable no hacer deporte sin estar pegado a un Smartphone o no escatimar en gastos a la hora de comprar unas zapatillas para correr. ... "
" ... El problema con la micro-trampa es que por su misma naturaleza, es sutil. Así que si usted siente que tiene razones para preocuparse, puede caer en la trampa de volverse obsesivo o demasiado celoso. Por eso, asegúrese de que sus preocupaciones están fundadas antes de saltar a las conclusiones. ... "
" ... Es simpático y hablador. No le cuesta generar empatía. Entre charla y charla en los descansos te hace creer firmemente que es el compañero de oficina ideal: responsable durante la jornada pero adepto al gin-tonic a partir de las nueve, implicado pero no obsesivo, eficiente aunque sin extra limitarse; vamos, para llevárselo a casa después del cierre. Es bueno, lleva entrenándose toda su vida para ello, y por esa razón tardarás en verle el plumero. Pero lo harás. Y tanto que lo harás. ... "
" ... Hay personas adictas a comprar, otras adictas al deporte, y también las hay adictas al dinero. Esta patología se denomina crematomanía, o deseo obsesivo por acumular dinero y riquezas, y, como todas las demás manías, es difícil de tratar. ... "
" ... L’enfant terrible de las letras francesas vuelve a dar en el clavo… Su novela se devora como si de un manjar se tratase; algo difícil de explicar (pero cierto) cuando se trata de humor ácido y en ocasiones hasta desolador. Pero quizás ahí radica el valor añadido de un autor que resulta incómodo y despiadado en su búsqueda por retratar el deterioro de una sociedad que gusta de mirarse el ombligo. Florent-Claude tiene 46 años y es bastante obsesivo: en su deambular por París recuerda los amores fracasados y los momentos que le han llevado a un desarraigo solitario terriblemente lúcido. ... "